Si bien la gamificación es una industria poco explotada en el mundo laboral, para las organizaciones funciona como respuesta a la solución de varios problemas que pueden presentarse. De esta forma, la gamificación se divide en una serie de elementos lúdicos que permiten a los usuarios aprender de forma entretenida.
Al ser estos elementos totalmente personalizables, los elementos lúdicos que la gamificación entrega pueden adaptarse en su totalidad. Por ejemplo, si una empresa tiene un evento digital, agregar una actividad permite barrer con la fatiga que genera una videollamada y realiza un llamado a la acción y la motivación.
A esto, se suma la posiblidad de hacer un onboarding a distancia y entretenido, sobre todo para las organizaciones que trabajan la mayor parte del tiempo de forma remota.
Implementando la Inteligencia Artificial
Dentro de los elementos que ya empiezan a ser implementados en este rubro, está la Inteligencia Artificial.
Con esta nueva tecnología, los usuarios pueden aprender de forma mucho más autónoma y personalizada, debido a los elementos lúdicos de un juego y el apoyo de un asistente virtual que facilite la búsqueda de contenidos y a su vez, sirva como refuerzo de aprendizaje.
Sin duda que la gamificación tiene muchos elementos que ayudan a las organizaciones a optimizar su rendimiento y mejorar la experiencia de aprendizaje de sus colaboradores.
La gamificación no sólo se trata de hacer las actividades laborales más divertidas, sino que también puede tener un impacto significativo en la retención de información y la participación activa.
En el dinámico mundo laboral actual, adoptar estrategias innovadoras como la gamificación no solo es una opción, sino una necesidad para aquellas organizaciones que buscan mantenerse a la vanguardia y garantizar el desarrollo continuo de sus colaboradores.
La gamificación, respaldada por la tecnología emergente, se presenta como un catalizador para el cambio positivo en el panorama empresarial.