Con largos periodos de cuarentenas, oficinas cerradas y recesos en el trabajo, la educación online ha experimentado un aumento nunca antes visto. Una de las principales tendencias de aprendizaje de este año 2020 será el microaprendizaje.
Esto se refiere a aprender a través de pequeñas unidades de conocimiento, proporcionando información específica para lograr un objetivo de aprendizaje pequeño. Sus ventajas, sin duda, lo mantendrán en la lista de popularidad y, muy especialmente, en el espacio de aprendizaje corporativo.
Esto de a debe a que, el microlearning se ajusta tanto a una charla más bien informal, como a un segmento de un curso estructurado de eLearning, o incluso una cápsula de apoyo al desempeño. Independiente de dónde y cómo se implemente, lo que tiene en común es: la brevedad, que es lo que lo define; y una “idea única”, es decir, el contenido se limita a un solo tema, idea o concepto específico.
Microaprendizaje, aprendizaje social y gamificación
El microaprendizaje se puede impartir de diversas formas, pero es a través del móvil donde tiene su mayor impacto. El acceso móvil en cualquier lugar y en cualquier momento permite un mayor acceso y facilidad para aprender sobre la marcha. Casi parece una obviedad, ya que este dispositivo se ha convertido en un elemento imprescindible para cualquier persona: vivimos con el teléfono móvil desde que despertamos con su alarma en la mañana, hasta que nos vamos a la cama. De esta manera, el microaprendizaje es ideal para aprender un nuevo concepto o una nueva habilidad, mientras esperamos en el tráfico o hacemos la cola en el supermercado.
Si el microaprendizaje móvil incorpora además el aprendizaje social, mejora la experiencia de aprendizaje al profundizarla y enriquecerla a través de la interacción y colaboración. Lo mismo si incorpora herramientas como la gamificación, convirtiéndola en una experiencia divertida y atractiva, que además, al incluir el análisis de datos, permite a las empresas llevar un registro completo acerca las brechas de conocimiento y la puesta en práctica de los conocimientos y hábitos adquiridos.
De alguna manera el microaprendizaje será cada vez más explorado por las empresas para capacitar a sus colaboradores, convirtiéndose en un método potente para capacitar en el mundo real sin las dificultades ni limitaciones de las metodologías más tradicionales.